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Natural de Iquitos. Ingeniero Civil de profesión y curioso de vocación. Soy un lector compulsivo y apasionado por las personas.

lunes, 4 de abril de 2011

Los errores de los candidatos durante el debate

El día de ayer se realizó el debate electoral entre los llamados cinco grandes y pese a las enormes expectativas que generó, no hubo mayores sorpresas, aunque sí muchos hechos anecdóticos, es natural que los contendientes cometieran algunos errores, después de todo siguen siendo humanos (al menos eso creo), sin embargo hubieron algunos errores que no fueron fruto del momento sino de estrategia, por ejemplo:

Ollanta Humala, debido a su condición de líder indiscutible en la encuestas, le llevó a arriesgarse menos que nadie, así que decidió no ir al debate, él fue a una conferencia de prensa, la polémica no era con él, la idea era clara, no caer en provocaciones, sin embargo la estrategia del "no oigo nada soy de palo, tengo orejas de pescado" le puede salir muy mal, cierto, ¿dónde quedó el Humala combativo? Es impensable que a tan solo una semana de las elecciones pueda perder sus votos, pero hay un 30% de indecisos que han estado meditando profundamente por quien decantarse y a nadie le gusta la idea de un gobernante que no esté preparado y esa fue, precisamente, la impresión que dio.

Keiko Fujimori, prácticamente toda su presentación se puede resumir en hacer todo lo que su padre hizo, porque "su padre sólo hizo cosas buenas". La candidata presentó muy poca o ninguna novedad. Su estrategia siguió siendo la misma que durante toda su campaña, mantener a toda costa su 18-20% y esperar que sea suficiente para pasar, a estas alturas también es imposible que pierda votos del fujimorismo, así que sin nada que perder y mucho que ganar debió arriesgar más, en unas elecciones que podrían definirse por décimas, la tibieza puede costar caro. La única vez que despertó algo de emoción, fue durante sus palabras de despedida, cuando, amparándose en ser la última en hablar, lanzó sendas pullas a todos sus contrincantes.

Alejandro Toledo, en varias ocasiones se le notó nervioso al hablar, pero lo que realmente me procupó fue su insistencia en su campaña del miedo, si ves que una estrategia tiene el efecto contrario al deseado, entonces ¿por que insistir con ella? Simple, terquedad pura, la campaña del miedo no ha afectado a Humala, o mejor dicho sí le afectó pero de manera positiva, aún así Toledo se mantuvo en sus trece y le atacó cada vez que tuvo oportunidad, error, el "enemigo" a destruir no era Humala, no con tantos votos a su favor, de hecho el que más daño hizo a Ollanta fue Ollanta mismo. La terquedad de Toledo no le permitió ver que a quien debió atacar de lleno fue a Castañeda, de lejos el más débil de la manada, y por tanto debió tratar de captar sus votos migrantes. Mala estrategia, lo que debió hacer durante todo el debate lo hizo sólo por unos instantes: centrarse en el tema educación y recordar que él salió de la pobreza gracias a ella, eso sí es algo con el que peruano común se identificaría al ser una aspiración que todos tenemos.

Pedro Pablo Kuczynski, un debate es el terreno perfecto para un tecnócrata como PPK, se esperaba mucha más contundencia de su parte y de esa forma terminar de capitalizar su constante ascenso en las encuestas, en lugar de ello optó por la serenidad, pero no era lo que la gente esperaba, de acuerdo puede ser una buena estrategia, pero pudo ser mejor. Otro error se dió fuera del debate, no debió levantarse tan temprano para ir a Villa  María del Triunfo (Ticlio chico), la campaña es importante, pero en el debate no sólo se oyen las propuestas, también se presta atención a cada gesto del candidato, sus contendientes tomaron el domingo con calma para llegar frescos, mientras que a PPK se le notó cansado y eso estuvo mal, sobretodo teniendo en cuenta la preocupación de la población por su avanzada edad.

Luis Castañeda, esta era su última oportunidad de detener su caída y volver a subir, debo decir que se comportó muy bien, pero no alcanzó, quizá su principal error fue ir al debate, hay veces que es mejor perder para ganar, si hubiera dado un paso al costado aduciendo que lo hacía por el bien del país hubiera convertido a la gran mayoría de sus detractores en fieles seguidores y hubiera asegurado una buena posición en las próximas elecciones, sin mencionar los beneficios que pudiera conseguir en una posible alianza política. Tardaste mucho en reaccionar, perdiste tocayo, caballero no más.

Como siempre, la decisión es tuya amigo lector, vota a conciencia, el Perú lo necesita.

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