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Natural de Iquitos. Ingeniero Civil de profesión y curioso de vocación. Soy un lector compulsivo y apasionado por las personas.

martes, 5 de abril de 2011

EL MILAGRO PERUANO

El Milagro Peruano
Lo prometido es deuda…

¿Por qué considero que ningún candidato ofrece todo lo que necesitamos en materia de Educación?

Más de una vez he oído a nuestros candidatos ofrecernos llegar a tener la mejor educación de América Latina, como si fuera una gran aspiración, gracias, pero no, si realmente quiero desarrollar cualquier área de mi vida, siempre aspiraré a ser el mejor y no espero menos para mi Nación.

Cada gobierno que ha asumido el poder ha traído su propia reforma educativa y ninguna ha funcionado, andamos a ciegas, tanteando el camino, probando una y otra estrategia fallida, a la espera de que el azar nos permita dar con la correcta, yo pregunto, ¿por qué en lugar de andar a ciegas no aprendemos de la mejor educación del mundo y buscamos la manera de aplicarlo al Perú? Soy un firme convencido de que la educación es nuestra única esperanza como nación y la única manera de dejar atrás a nuestro oscuro pasado.

¿Cuál es el país con la mejor educación en el mundo? Sin lugar a dudas Finlandia y lo ha sido por los últimos catorce años, antes de que me respondan, al igual que un amigo mío, que seguramente se trata de una realidad y una cultura diferente y por lo tanto imposible de aplicar al Perú, les diré que sí, se trata de una realidad y una cultura diferente, para empezar Finlandia no sólo es conocido en el mundo por su excelentísima calidad educativa, sino por ser la democracia con menor índice de corrupción (virtualmente CERO), uno de los 30 países más ricos del mundo, uno de los 10 países con mayor renta per cápita (y no como en el Perú en que pocos ganan mucho y muchos ganan poco, existe una baja disparidad de ingresos), el quinto país con mayor tasa de usuarios de internet, uno de los 20 países europeos con mayor esperanza de vida y el séptimo país más competitivo del mundo, ¿se les hace agua la boca?, definitivamente una realidad diferente a la nuestra, pero ¿no será que su alto nivel educativo no es consecuencia de todo esto, sino al contrario?, su envidiable estado de bienestar es consecuencia de su sistema de educación.

La piedra angular del sistema educativo finés son sus excelentes profesores, no cualquiera puede ser profesor, para postular a la carrera magisterial se necesita una nota mínima en secundaria de 8 (en nuestro sistema vigesimal sería un 16), y sólo el 20% de estos postulantes son admitidos por las universidades (todas estatales), el examen de admisión más que evaluar conocimientos, evalúa capacidades y aptitudes para la educación y el análisis, una vez ingresados, la formación es sólida, minuciosa y gratuita, dura seis años y se prima la capacidad de un profesor para reflexionar y tomar decisiones en función de su práctica pedagógica. Ser maestro tiene tanto prestigio social y una escala remunerativa similar a la de un médico o abogado.

En cambio, en el Perú, la gran mayoría de educadores peruanos son mediocres, así, con todas sus letras, no importa si se les dota de la mejor infraestructura, se les duplican el sueldo  o se les dan estabilidad laboral, jamás podrán formar mejores peruanos porque ellos no lo son. Todos hemos visto esta mediocridad de primera mano, visto cómo los postulantes a las universidades escogen las más variadas carreras como primera opción y como segunda, casi invariablemente, escogen ‘profesor de…’, y no tienen reparos en decir: “aunque sea de profesor”, La cruda verdad, es que nuestros profesorado, está integrado en su mayoría por aquellos que no pudieron ser lo que en realidad anhelaban ser y se “contentaron” con ser profesores. Pregunto, si estas personas no pudieron alcanzar sus sueños, si no tuvieron la capacidad ni la disciplina suficiente, ¿qué podemos esperar de los alumnos que ponemos bajo su tutela?, la mediocridad no engendra excelencia, la mediocridad engendra mediocridad, sólo la excelencia puede engendrar excelencia. A lo largo de su historia el Perú ha entregado al mundo grandes hombres y mujeres, quizá el más reciente y emblemático sea el escritor y premio nobel, Mario Vargas Llosa, sin embargo pueden estar seguros que no se formaron gracias a nuestro sistema educativo sino a pesar de. A ello se suma la degradación de la carrera magisterial al punto de considerarla una carrera técnica en la que aceptamos de manera indiscriminada a profesores provenientes de universidades, tecnológicos y pedagógicos.

Es hora de cambiar las cosas, y el primer paso es hacer como los fineses, cambiar, por ley, el nivel de exigencia y decir:
NO CUALQUIERA PUEDE SER UN EDUCADOR.

Por supuesto, mejorar a los profesores no es suficiente para lograr una educación de primer nivel, la reforma debe ser integral y atacar desde todos los frentes posibles y para ello existen otros puntos de la educación finlandesa que podemos tomar como modelo:

La enseñanza es gratuita y obligatoria desde los 7 hasta los 16 años de edad (6 años de educación primaria y 3 de secundaria).
El 95% del sistema educativo es estatal, de hecho no hay una sola universidad privada, no porque estén prohibidas sino porque son incapaces de competir con la educación sólida y totalmente gratuita de las estatales (incluyendo transporte para alumnos que vivan a más de 5Km de su centro de estudios, desayuno y/o almuerzo en las escuelas, útiles escolares y absolutamente todo lo necesario para una buena educación)
La educación no está centrada en la rendición de exámenes, sino en aprender a ser un miembro responsable y ético de la sociedad, con un enfoque analítico más que una mera transmisión de conocimientos.
Las escuelas están a cargo de las municipalidades y existe una estrecha colaboración entre padres, escuela y estado
Hay un consejo de evaluación de las escuelas, que mide la calidad de la enseñanza.
Los colegios están altamente tecnificados con pantalla gigante en las aulas, modernas computadoras (una por cada dos estudiantes), libros electrónicos, etc.

Como verán, si bien son medidas costosas, son perfectamente aplicables, de manera gradual, a nuestra realidad, entonces ¿por qué no hacerlo?

De hecho, uno de los candidatos parece haberse inspirado en el modelo finés a la hora de elaborar sus propuestas en materia de educación, ¿saben quién es?, sino es así, lean Planes de gobierno: Educación o directamente la página 25 del Plan de Gobierno del PPK, hay una línea que me gusta en especial:

“Establecer requisitos más exigentes para ser profesor.”

Creo que esa es la solución que necesita el Perú, es por ello que ante unas propuestas económicas tan parecidas, me he decidido por la que considero la mejor propuesta educativa.

Estoy harto de leer la historia del milagro japonés y de otras naciones que han sabido salir airosos de las épocas más oscuras de su historia, mientras espero inútilmente que mi Perú empiece a hacer lo propio, es hora de comenzar a cambiar el Perú, para que mañana, el resto de países se pregunte: ¿A qué se debió el Milagro Peruano?

El Milagro Peruano es posible y empezará con la educación.

Uno de nuestros candidatos a la presidencia ha tratado de atraer votos con una campaña… digamos llamativa: “no es hora de arriesgarse, ¿tú te la juegas?, ni hablar causa, yo no me la juego, yo voto seguro…”

Yo quisiera responderle que:
YO SÍ ME LA JUEGO, ME LA JUEGO POR LA EDUCACIÓN, ME LA JUEGO POR EL FUTURO, ME LA JUEGO POR EL PERÚ, ¿Y TÚ TE LA JUEGAS?

Gracias por leerme, si te gustó mi post recomiéndalo a tus amigos y no olvides que me encantaría leer algún comentario tuyo.

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