Datos personales

Mi foto
Natural de Iquitos. Ingeniero Civil de profesión y curioso de vocación. Soy un lector compulsivo y apasionado por las personas.

miércoles, 13 de abril de 2011

El Abismo y la Bestia

Vi a mi pueblo correr hacia el abismo,
quise advertirles y hacer que se detuvieran,
mas no me oyeron o les dio lo mismo
y siguieron corriendo con todas sus fuerzas.
Lo que hubiera al fondo, nadie lo sabía,
era un abismo profundo y desconocido,
un salto del que nadie jamás volvía,
y hacia allá se dirigían como enloquecidos.

Vi a muchos huir en otra dirección
y pensé que, al menos, ellos se salvarían,
entonces, de la oscuridad emergió
una enorme bestia de los antiguos días.
Miré a la bestia y quedé estupefacto,
hubiera jurado que el monstruo estaba muerto,
con todo lo que costó derrotarlo,
y había regresado desde el mismo infierno.

Resonaron gritos de horror y agonía,
nadie sabía cuál camino debía tomar,
enfrentar a la bestia ya conocida
o saltar al vacío de inmensa oscuridad.
Aunque lo más extraño de todo esto,
es que mientras muchos gritaban aterrados,
había otros que me parecían contentos,
como si todo aquello lo hubieran deseado.

Cercados entre el abismo y la bestia,
no podía ver alguna forma de escapar,
cerré los ojos con gran impotencia
y rogué porque alguien los viniera a salvar.
Entonces oí una voz a mis espaldas
que me dijo: "Insensato, no pierdas el tiempo,
toma esta ruta y huye de la matanza,
tu pueblo está perdido, olvídate de ellos."

Miré al abismo y me sentí morir,
vi a la maldita bestia a mi gente acercarse,
quise llorar y en su lugar sonreí,
éste no era el momento para acobardarse,
quizá este sea el final de nuestro tiempo,
pero yo he de estar entre el abismo y la bestia,
al lado de mi pueblo y su destino
y si hemos de caer, lo haremos a nuestra manera.

                                       Alejandro Gómez

2 comentarios:

  1. Recorde un poema que escribio el hijo del fundador de la sociedad Thule en Alemania, el poema se le encontro cuando fracaso el levantamiento contra Hitler (la famosa operación Valquiria), en el decia algo como “hemos liberado a la bestia, pero se ha roto el sello, estamos perdidos”. El Derecho es el vosal, hay que confiar en él.

    ResponderEliminar
  2. No termino de decidirme entre tranquilizarme con tu comentario o asustarme más, esperemos que el bozal sea fuerte, pero si todo falla, como digo en el poema: si hemos de caer, lo haremos a nuestra manera: Luchando. Ya echamos a un tirano, creo que aún no hemos perdido la práctica :-)

    ResponderEliminar